Las actividades que realizamos como seres humanos son el principal motor del cambio climático. El metano y el carbono son los gases que se acumulan en la atmósfera y que producen el efecto invernadero. Reducir las emisiones de estos gases es esencial para preservar nuestro planeta y garantizar un futuro sostenible para las nuevas generaciones.
La huella de carbono es un indicador ambiental que se utiliza para medir la cantidad de gases de efecto invernadero que producimos los humanos. Esta herramienta es muy importante para evaluar y conocer el impacto ambiental de nuestras acciones. Se usa para cuantificar la cantidad de Gases de Efecto Invernadero que se liberan a la atmósfera debido a diversas actividades humanas. Conocerla nos permite trabajar para reducirla con medidas eficaces que ayuden a colaborar para minimizarla.
Por eso, en esta 19° edición del Gordo de Navidad trabajemos en las tareas que nos ayuden a combatir el cambio climático en conjunto con la EcoComunidad. Se trata de un grupo de personas que se involucran en prácticas y medidas orientadas a generar conciencia ambiental con el objetivo de preservar y cuidar el planeta en el que vivimos.
Realizan actividades junto a la comunidad Botella de Amor que es una entidad sin fines de lucro dedicada al desarrollo sostenible y al mejoramiento de las condiciones de vida.
Entre las acciones pensadas para implementar durante el torneo, se destacan la implementación de vasos reutilizables y la distribución de colilleros a lo largo de todo el predio.
En cuanto a la huella de carbono precisamente, además de medirla, el objetivo es que luego de obtener ese valor podamos compensar los daños con la plantación de árboles en diferentes zonas de nuestra ciudad.
Otra de las medidas que el torneo ya puso en práctica es el reciclaje. Con viejas lonas de ediciones anteriores se hicieron mochilas, bolsas, botineros, entre otras cosas. El fin último de esta medida puesta en práctica es que nada se descarte, encontrarle una vida útil a aquellos que ya se utilizó en vez de simplemente descartarlo.
Este 2023, el GDN con la EcoComunidad se comprometen a trabajar en actos que permitan reducir las emisiones a nivel colectivo y que contribuyan a la lucha contra el cambio climático. La reducción de estas emisiones es una oportunidad para construir un compromiso vital con nuestro hogar, la Tierra.
Por Manuela Gómez